Caso Francisco Sueldo: tratamiento psiquiátrico ambulatorio para Lascurain
“Por sorpresa no nos tomó nunca porque lo sabíamos desde el principio cuando empezó toda la causa y de cómo podía seguir su tratamiento. A veces uno tiene la esperanza que quede guardado de por vida por su demencia y que nadie se pueda rehabilitar. Hay personas que se quieren hacer cargo y un montón de facultativos que pusieron el gancho, es decir, la firma para hacerse cargo de él”, explicó.
“Patología psiquiátrica tiene, entonces, es muy difícil luchar con eso”, aseguró.
“Tenemos que aceptar lo que impone la ley y la justicia y seguir nuestro camino, pero viéndolo de cerca porque cuando este se mande una el primero que voy a sacar la bandera voy a ser yo”, sentenció. “Él no puede conducir ningún tipo de vehículo y lo que haga es responsabilidad de la familia”, aclaró.
Por otro lado, Walter habló del sentido proceso que sigue atravesando la familia con la muerte de Francisco.
“Desde el momento cero, si bien estuvimos unidos como familia, cuando son las 9 de la noche uno queda solo y somos nosotros los que nos tenemos que dar fuerza. Ustedes saben que mi esposa tuvo un intento de suicidio, estuvimos con tratamiento psiquiátrico y ayuda terapéutica. Siempre buscamos querer salir”, dijo.
“Hoy estamos con proyectos y con ganas de seguir haciendo cosas por Fran. Fran no vino en este mundo en vano entonces nosotros como papás debemos de develar a qué vino. Ayudamos a personas que han pasado por lo mismo para que sepan que no todo está perdido. Uno se siente acompañado y a veces acompañamos a otras familias. Es un proceso en el que uno tiene y quiere salir a flote“, afirmó.
“Nos acompañamos mutuamente con mi esposa, ella hace mami hockey en Unión y sus compañeros de trabajo la ayudaron un montón”, agregó.
Walter dejó un cálido mensaje para las familias santafesinas: “Yo hubiese dado la vida para que Fran vuelva y muchas veces le digo a las personas que tienen sus familias con sus hijos y están bien, que tienen oro, que son millonarios“, sostuvo.
“Fran me sigue enseñando. Fue un ángel que pasó por mi vida que Dios me lo presentó, me lo dejó diez años, lo disfruté y llegó un momento que Dios lo llevó. Pido, rezo, oro y tengo la fortaleza de él”, expresó.
“Mi corazón está tranquilo porque hice todo con Fran”, concluyó.