Boca, con equipo alternativo, derrotó 3-1 al Sabalero y le sumó otro resultado negativo en el semestre. Poco juego, mal resultado, todo negativo para el Rojinegro y para Domínguez que depende del partido del jueves para continuar como entrenador.
[desktoponly]
[/desktoponly]
[mobileonly]
Gol de Gonzalo Bueno:
Eduardo Domínguez post partido:
Comentario final de Enrique Cruz:
[/mobileonly]
Sin hacer grandes méritos, Boca sacó ventaja en el partido aprovechando errores de Colón. Una distracción permitió en la marca de un córner que dos jugadores del Xeneixe queden solos por el segundo palo y sea Lisandro Magallán quien empuje el balón a la red para poner el 1-0. El segundo, un mal pase de Fritzler hacia atrás que permitió al colombiano Sebastián Villa encarar a toda velocidad el arco de Burián que salió a cortar y le facilitó la actuación al jugador de Boca para que el árbitro Germán Delfino sancione un penal inventado. Mauro Zárate fue el encargado de ejecutar la pena máxima y poner el 2-0.
En el juego, los dirigidos por el Mellizo Barro Schellotto no eran más que el Sabalero. Los de Domínguez eran superados en las acciones individuales por las diferencias de jerarquía en el plantel, pero en lo colectivo Boca no era más y el 2-0 era exagerado. La velocidad y agresividad que le imprimió Boca a cada ataque parecía que era un dominio total del local, pero la realidad es que Burián no tuvo mucho trabajo.
El resultado adverso y, sobre todo, los nombres puestos en cancha por Domínguez hicieron que dé la sensación que el partido estaba definido desde que Zárate cambió el penal por gol. La falta de jugadores de características ofensivas o que aporten despliegue en ciertas zonas del campo le llevaron tranquilidad a Boca que se limitó a dejar pasar los minutos e intentar aumentar la diferencia a través de una contra. Los cambios realizados por el técnico también fueron discutibles y hasta inentendibles.
El 3-0 iba a llegar por medio de Carlos Tévez, quien había ingresado hacía minutos, que definió desde afuera del área a un costado de Burián. La debacle del Sabalero iba en aumento y aún restaban varios minutos por jugar.
A pesar de la falta sostenida de ingenio durante el partido, Agustín Rossi no iba a terminar con la valla invicta. Gonzalo Bueno iba a aprovechar un rebote del arquero Xeneixe que cortó un mano mano y le quedó al delantero uruguayo que definió con el arco a su merced.
Otra floja actuación de Colón ya no solo en el campeonato sino bajo el mando de Eduardo Domínguez. A pesar que la serie con Junior por Copa Sudamericana es lo más importante para el Sabalero, no debe relajarse en el torneo. Engrosar el promedio debe ser también uno de los objetivos.
El siguiente compromiso por Superliga será Newell’s, pero el jueves, ante Junior, será un partido en que se podrá definir, incluso, el futuro del entrenador.
