Dos robos en 48 horas en el club Newell´s de B° Roma
Los delincuentes no tienen límites: robaron dos veces en 48 horas en el club Newell´s de barrio Roma en la ciudad de Santa Fe. En ambas oportunidades, los ladrones actuaron bajo la misma modalidad forzando la puerta principal del comedor y llevándose objetos de valor.
El primero de los delitos ocurrió este miércoles por la madrugada. Tras la denuncia de los directivos, la policía logró recuperar parte de lo robado y aprehender a dos hombres como autores del robo. Sin embargo, este viernes por la madrugada volvieron a entrar al comedor de la institución deportiva para robar.
Miguel Cantero, presidente del club Newell´s, se mostró afligido por lo sucedido y pidió respuestas de las autoridades locales ante la ola de robos que afecta no solo a la institución sino a todo el barrio.
“Te dan ganas de cerrar la puerta del club, que venga algún gobernante y que se haga cargo, que lleve adelante el club porque que te pasen cosas como estas te tiran abajo”, dijo.
“El club va a estar abierto y va a seguir; trataremos de ordenarnos un poquito, de reparar lo que está roto y seguiremos adelante como podamos“, sostuvo.
“La inseguridad que se está viviendo es lamentable”, insistió. “Yo me encuentro el miércoles a la mañana de que habían forzado la puerta del comedor y se llevaron varias cosas. Hice la denuncia como corresponde, al otro día me llama el comisario a primera hora diciendo que habían secuestrado algunas cosas. La fuimos a buscar al mediodía con el encargado y anoche volvieron a robar. Forzaron la puerta del comedor y se llevaron las mismas cosas”, relató.
“Quiero saber el nombre del fiscal porque no puede ser que te largue a los delincuentes. Ellos me dijeron que tienen entre 39 y 40 años tienen y con muchos antecedentes penales“, advirtió Cantero.
“Es una risa que en dos días te vuelvan a robar y a romper todo como rompieron la puerta principal del comedor”, dijo. “Te da una impotencia bárbara, no sé en qué va a terminar todo esto. Te pone muy mal que pasen estas cosas”.
Para concluir, Cantero hizo un pedido desesperado: “Lo que le pido al comisario es que recorran un poquito más el barrio con los patrulleros. El patrullero debería pasar más seguido pero hablás con el comisario y te dice que no tienen coches ni gente. Esto es también es triste”.
