A principios del mes pasado, cuando se tornó frecuente el robo a colectivos, se decidió instalar botones de pánico en los móviles que circulan de noche por la ciudad. Sin embargo, la medida no abarcó al total de las unidades y, por otra parte, su eficacia es discutible, porque los asaltos a colectivos no disminuyeron y porque el botón de pánico no permite una identificación del delincuente para su posterior detención.
Para combatir esto el Concejo aprobó un proyecto de la autoría de Tomás Norman por el cual se ofrecerá el boleto como espacio de publicidad. Como algunos recordarán, hace años, un cine y una empresa de electrodomésticos hacían publicidad en el reverso del boleto. La diferencia es que, a partir de ahora, lo recaudado tendrá una finalidad concreta: incorporar cámaras de seguridad, para que pasajeros y choferes viajen tranquilos.
Escuchá a Tomás Norman – SOL 91.5
