El grana alcanzó por primera vez en su historia la final del certámen más importante de Sudamérica. Eliminó a River por un global de 4-3 y espera por Gremio o Barcelona de Guayaquil.
En un partido histórico, Lanús llegó a la final de la Copa Libertadores tras eliminar al River de Gallardo que tenía todo servido para ser ellos los finalistas.
El millo estaba ganando 2-0 el partido de vuelta (3-0 global, ganó 1-0 la ida) y se metía en una nueva final. Nacho Scocco y Montiel fueron los autores de los goles con los que dejaban eliminados a Lanús.
Sobre el final del primer tiempo, José Sand descontó para el local. Pero aún faltaban algunos goles para revertir la serie. En los primeros minutos del segundo tiempo, Pepe Sand nuevamente convierte y empata el partido, River aún estaba un gol por encima en el global.
Más tarde Lautaro Acosta pone por encima en el marcador a Lanús y finalmente Alejandro Silva de penal le da la clasificación al equipo de Almirón.
Si bien la remontado granate fue histórica, el partido estuvo “manchado” por el VAR (asistencia arbitral por video), que no sirvió de ayuda para el árbitro a la hora de sancionar un penal para River, no expulsar a Román Martínez, pero sí asistir para cobrar la pena máxima a favor de Lanús (bien cobrado). Siendo éste el gol que le dió la clasificación.
Un 4-3 final histórico, con todos los condimentos y que será recordado para siempre. De Gremio de Porto Alegre o Barcelona de Guayaquil saldrá el rival para la final. Los brasileros están 3-0 arriba en la serie.
