¿Qué hacer con el embalsado de la Laguna Setúbal?
La vegetación acuática que se formó entre los pilares del exferrocarril que cruzaba la Laguna Setúbal a la altura del Faro de la ciudad de Santa Fe, sigue dando que hablar y generando polémica entre los que son habitué del espejo de agua, clubes náuticos, especialistas, autoridades y los mismos transeúntes de la Costanera.
Las imágenes son impresionantes y vislumbran como el muro verde de vegetación acuática sigue creciendo y, a pesar del repunte del nivel del agua y de los intentos de los autoconvocados náuticos con sus embarcaciones privadas, parece no desprenderse.
Leer más: Con embarcaciones y machetes intentaron desobstruir el bloqueo de vegetación acuática de la Setúbal
Es en ese marco, que el equipo de redacción web de Sol Play 91.5, se comunicó con la licenciada en Biodiversidad e investigadora de Conicet Santa Fe, Zuleica Marchetti, quien en primer lugar aclaró: “La vegetación que estamos viendo no se trata exclusivamente de camalotes. De hecho, las dos especies de camalotes presentes en el embalsado son las menos representadas. Lo más común que hay es la vegetación que localmente se la conoce como Canutillo y la especie Paspalum Repens, que son las que ocupan la mayor parte del embalsado“.
“Son plantas típicas de nuestra región que, en alguna oportunidad, con el repunte del río, se descalzaron de los márgenes de los arroyos y alcanzaron los cauces empezando a migrar aguas abajo hasta que un embalsado de dimensiones importantes fue el primero en encallar en los pilotes“, explicó la especialista en relación a la formación del embalsado y continuó: “Este primer embalsado ha ido actuando como dique para otros que venían aguas arriba, además de otras especies flotantes. Se fueron entrelazando unas con otras y forman lo que vemos hoy: la pared verde que cubre esa parte de la laguna“.
Sobre el comienzo de ese entramado de vegetación que quedó amarrado a los pilotes, Marchetti consignó: “Esto inició a finales del año pasado cuando estábamos con niveles hidrométricos bastante bajos y el Puente Colgante tenía casi la totalidad de su luz también obstruida con vegetación. Tras una tormenta con vientos importantes, sumado a un incremento del nivel hidrométrico, esos embalsados que estaban en el Puente Colgante, se descalzaron y se fueron aguas abajo“.
Leer más: Fenómeno natural: se generó una pared de plantas acuáticas entre los pilotes de la Laguna Setúbal
“Los pilares del exferrocarril también tenían vegetación y después mermó. Pero el nivel del río, al incrementarse, trae más vegetación y lo que quedó comenzó a actuar de dique para lo que siguió viniendo“, puntualizó y afirmó: “No fue suficiente el incremento del río, no hubo vientos suficientes para mover la vegetación y lo que quedó funciona como dique que frena la navegación de la vegetación que navega por el cauce“.
Finalmente, Marchetti opinó sobre qué hacer con esa vegetación, tras la polémica generada por los autoconvocados náuticos que intentaron abrir paso durante el fin de semana: “Actualmente no diría que hay que esperar a que se vaya solo, porque la sección está completamente cubierta de vegetación y, hoy día, funciona como dique“.
“No sólo sigue llegando vegetación aguas arriba de la Laguna, sino que aguas abajo (entre el faro y los dos puentes) la vegetación que ya está encallada y sigue creciendo. Entonces, más allá de algún repunte del río, no es algo que vaya a descalzar la vegetación. Con esta altura hidrométrica, la vegetación sola no se va a descalzar, esa sección no se va a liberar“, aseguró.
Leer más: Convocan a la limpieza colectiva de la laguna Setúbal
En la misma línea, la investigadora de Conicet sostuvo: “Habría que abrir paso y eso hay que hacerlo con intervención humana. Naturalmente, ni el viento ni el río lo va a hacer. El trabajo que se hizo el fin de semana implicó mucho tiempo, mucho esfuerzo y muchos recursos y el resultado que se logró es muy pequeño. Pequeñas embarcaciones no van a ser suficientes para abrir una brecha de tal tamaño que permitan que después el embalsado empiece a fragmentarse y disiparse“.
“Para lograr una apertura tal, es necesario embarcaciones de mayor tamaño que tengan más potencia y que puedan traccionar de manera conjunta superficies más importantes del embalsado“, indicó.
