La peor catástrofe hídrica de la historia de Santa Fe
Se cumplen este 29 de abril, 20 años de la inundación de la ciudad de Santa Fe por el desborde del río Salado. En aquel abril de 2003 se registró la peor catástrofe hídrica de la historia moderna de la capital provincial.
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La inundación causó muertes y pérdidas irreparables, irrecuperables. En números, el ingreso de las aguas del río Salado en Santa Fe dejó un tercio de la ciudad inundada con cerca de 150 mil evacuados de una población total de 380.000 personas, casi 500 centros de evacuados y 158 fallecimientos (entre personas ahogadas, infartos, suicidios y secuelas de todo tipo entre el 29 de abril de 2003 y agosto de 2004).
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El ingeniero civil Marcelo Berrón, fue la persona que hace 20 años le contaba a los medios de comunicación de Santa Fe la verdad sobre la inundación del río Salado, explicando los reales motivos del ingreso de la masa de agua crítica que arrasó con un tercio de la ciudad.
“El proyecto original de la obra de defensa de la circunvalación oeste comenzaba en la intersección con la traza de la ruta 11, en la salida del Puente Carretero, y hasta su cierre norte detrás del campo de Golf del Jockey en la zona del Hipódromo“, recordó Berrón.
“Dicha obra fue dividida en tres partes: el primer tramo, desde la ruta 11 (salida del Carretero) hasta la autopista; el tramo dos, desde allí hasta la zona del Jockey Club y el tres que cerraba el anillo de defensa entre calle Gorostiaga y Estado de Israel“, continuó contando el ingeniero civil.
En 1993 se licitó la obra, en 1994 se comenzó y en 1998 se finalizó, pero sin la concreción del tramo tres, por donde ingresó toda el agua del río Salado. “El terraplén de defensa del segundo tramo muere en un absurdo, con un muro de mampostería de 30 cm de espesor, transversal a la defensa, en calle Gorostiaga: fue por allí que ingresó el agua a la ciudad generando un río paralelo, un embalsado entre el terraplén de defensa de 9 metros de altura y las cotas naturales más altas de ciudad de Santa Fe, sin salida, que arrasó con todos los barrios del oeste“, explicó Marcelo Berrón.
Un río paralelo
Según el ingeniero civil, “el río Salado inundó tan rápido la ciudad porque encontró un orificio de entrada pero sin salida. Se formó un río paralelo y el agua quedó represada entre el terraplén de defensa y las cotas naturales más altas de la ciudad de Santa Fe. Por eso, del domingo 27 de abril de 2003 al miércoles 30, donde se registró el pico de la crecida, ese río paralelo que se formó arrasó con el oeste de la ciudad en tres días“.
“El miércoles 30 de abril, por la tarde, se registraron las primeras detonaciones sobre la avenida Mar Argentino para que el agua acumulada en el caso de la ciudad drene hacia la cuenca del Paraná. Con esa acción se se equipararon los niveles del río y del interior de la ciudad y se instalaron bombas para terminar de sacar el agua del ejido urbano“, recordó.
El Salado avisó 45 días antes
Según Berrón, “el 15 de marzo de 2003, el agua ingresó dos días por calle Gorostiaga, por el tramo que estaba incompleto“. En ese lugar, según el ingeniero civil, “se había ejecutado un terraplén de arena de no más de un metro de altura“.
“En ese preciso momento, el Estado sabía que era una zona crítica por donde podía ingresar el agua a todo el cordón oeste de la ciudad de Santa Fe. El gobierno provincial y municipal sabían cómo se comportaba el agua en esa zona; sabían que era el talón de aquiles de la ciudad“, finalizó la explicación el ingeniero civil, Marcelo Berrón.
