El sabalero ganaba con un gol de penal de Alan Ruiz, pero tras quedarse con diez, Eduardo Domínguez no acomodó el equipo y le permitió a Lanús igualar primero y pasarlo a ganar más tarde. Noche de malas decisiones en el rojinegro.
En un partido, cuanto menos curioso, Lanús venció por 2-1 a Colón con goles de Lautaro Acosta y Bruno Vides. Alan Ruiz había puesto en ventaja a Colón con un penal y por la misma vía, Javier Correa pudo aumentar para el sabalero, pero el arquero Andrada y el palo le negaron el grito de gol. La expulsión de Fritzler y la decisión de no rearmar el equipo por parte de Eduardo Domínguez marcaron un antes y un después en el encuentro, que a la postre, terminó costándole caro y que puede ser peor aún porque con la derrota, y si se dan otros resultados, puede salir hasta de la zona de clasificación a la Copa Sudamericana.
Ni el sabalero, ni el grana tomaron la posta del juego y fueron dominadores del desarrollo del partido. Colón abusó de los pelotazos (fórmula que le funcionó en el clásico y contra Olimpo) pero nunca pudo agarrar mal parada a la defensa del visitante. Lanús intentaba el juego asociado por abajo, pero no pasaba de ser “fulbito” lo que hacían los de Carboni. Mucho juego hacia los costados y carente de agresividad para penetrar la defensa rojinegra. Todo cambió, por minutos solamente, cuando Bernardi ingresó al área desde la izquierda y obligó a García Guerreño a cometerle penal. El encargado de ejecutar la pena máxima fue Alan Ruiz. El enganche, con una tranquilidad envidiable, realizó una carrera lenta y obligó a Esteban Andrada a elegir un palo. Con el arquero ya tirándose a uno de sus costados, Ruiz eligió el inverso y anotó su primer gol desde su retorno.
Apenas un minuto más tarde, nuevamente con Alan Ruiz como protagonista, Silvio Trucco marcó nuevamente penal tras una falta desde atrás de un defensor granate sobre el ex San Lorenzo en el punto penal. Ésta vez el encargado de rematar fue Javier Correa. El cordobés, quien no tuvo un buen partido, remató débil y no tan esquinado, Andrada lo tapó, el balón le pasó y dio en el palo, para finalmente cruzar todo el arco y marcharse afuera. La mala fortuna también jugó un rol importante en la ejecución del cordobés. Era una excelente oportunidad para casi liquidar el partido. Sobre el final de la primera parte se fue expulsado Matías Fritzler por doble amarilla y el resultado, aún favorable, quedaba más incierto todavía.
En el complemento fue incomprensible la decisión de Domínguez de no poner a un acompañante a Adrian Bastía en el medio. Si bien en el banco no contaba con muchas variantes, la elección de mandar a Alan Ruiz a ser la rueda de apoyo del Polaco no fue la mejor. Lanús creció un poco con esto y le complicó la existencia a Colón. El empate sorpresivo e inesperado fue un baldazo de agua fría. Alexander Domínguez, una de las figuras del sabalero en el campeonato salió mal a cortar un centro, cacheteó la pelota y se la dejó servida al Laucha Acosta para que defina con el arco vacío. El tanto engrandeció al grana y terminó de rematar la faena cuando Bruno Vides conectó un centro desde la derecha y concretó el 2-1 que sería definitivo. En pocos minutos se le escaparon tres puntos que en el futuro pueden costarle caro.
La victoria le hubiese permitido seguir afianzado en zona de clasificación a la Sudamericana, pero con el resultado adverso, podría llegar a perder esa posición si los que están por debajo en la tabla sacan resultados positivos. Con el parate por fecha FIFA, Colón tendrá tiempo para replantearse los errores hasta el partido con Godoy Cruz en el que deberá mostrar los cambios.
