Natalicio de René Goscinny, destacada figura de la historieta mundial
Este lunes 14 de agosto se cumplen 97 años del nacimiento del escritor y guionista francés, creador de importantes personajes de la historieta europea. A lo largo de su carrera, Goscinny llegó a colaborar junto a destacados ilustradores y dibujantes como Sempé, Morris y Albert Uderzo. Nació en París, en 1926, pero su infancia y adolescencia transcurrieron en la ciudad de Buenos Aires, junto a sus padres, dos inmigrantes judíos procedentes de Polonia.
Los padres de Goscinny se conocieron en París y se casaron en 1919, para eventualmente trasladarse a Buenos Aires, ya que su padre había sido contratado allí como ingeniero químico. En la capital argentina, el joven René estudió en escuelas de lengua francesa, y empezó a manifestar aptitudes para el dibujo a temprana edad, algo probablemente inspirado por los cuentos ilustrados que disfrutaba leer.
Hacia 1943 se vio obligado a conseguir su primer empleo, como ayudante de contabilidad en una fábrica de recuperación de neumáticos. Sin embargo, fue despedido poco tiempo después y, en 1945, emigra desde Argentina rumbo a Nueva York (Estados Unidos) junto a su madre, ya que su padre había fallecido pocos años antes. Para evitar servir en el ejército norteamericano, viajó a Francia en 1946 para enlistarse en las fuerzas armadas, donde sirvió en la localidad de Aubagne, en el 141º Batallón de Infantería Alpina. Allí su talento fue descubierto y fue designado como artista oficial del regimiento, estando a cargo de dibujar ilustraciones y afiches para el ejército. Luego de esta experiencia, Goscinny estaba listo para convertirse en ilustrador junior en una agencia de publicidad.
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Los primeros trabajos
Aún en Francia, uno de sus primeros proyectos de relevancia para el público fue una historia ilustrada basada en el cuento corto de Honoré de Balzac, “La muchacha de los ojos de oro“. En su regreso a Estados Unidos se encontró con una dura realidad: desempleo, soledad y pobreza.
En 1948 comenzó a trabajar en un pequeño estudio y conoció a Will Elder, Jack Davis y Harvey Kurtzman, futuras figuras fundamentales de la icónica Revista MAD. Posteriormente, Goscinny se convirtó en director de arte en Editorial Kunen, donde escribió cuatro libros para niños.
Fue cerca de esta época cuando conoció a dos dibujantes belgas que serían esenciales para su consagración como artista de historietas: Joseph Gillain, más conocido como Jijé, y Maurice de Bevere, más conocido como Morris. Con este último artista colaboró en la emblemática serie del vaquero Lucky Luke, período que inició en 1955 y que se prolongó hasta el día de su muerte en 1977.
Eventualmente, Goscinny se animó a regresar a Francia (en 1951) y por esos años conoció a otro dibujante prominente, Albert Uderzo, con quien inició una larga colaboración. Empezaron con algunos trabajos para Bonnes Soirées, una revista femenina para la que Goscinny escribió Sylvie. Goscinny y Uderzo también lanzaron la serie Jehan Pistolet y Luc Junior, en la revista La Libre Junior.
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Pilote, Astérix y más allá
En 1959, el sindicato Édifrance/Édipresse tomó la iniciativa de crear la revista franco-belga de cómics Pilote, publicación en la que Goscinny se convirtió en uno de los guionistas más productivos. En el primer número de la revista apareció Astérix, dibujado por Uderzo. La serie se convirtió en un éxito inmediato y su popularidad se mantiene hasta el día de hoy. Hacia 1960, con un cambio en la gerencia de la revista de por medio, Goscinny se convirtió en redactor jefe de Pilote; allí desarrolló gran variedad de historias y proyectos, que cosecharon notable éxito entre los lectores.
Goscinny murió a los 51 años, a causa de un ataque al corazón, el 5 de noviembre de 1977. Su fallecimiento ocurrió mientras el autor se encontraba trabajando en la escritura de “Astérix en Bélgica”, tomo que fue publicado en 1979 de forma póstuma.
En 1974 ganó el Premio Adamson al mejor historietista internacional (Suecia); desde 1996 el Premio René Goscinny, que se otorga anualmente en el Festival Internacional del Cómic de Angulema (Francia), sirve como un estímulo para los jóvenes autores de cómics de todo el mundo. En 2005, gracias a una decisión oficial del jurado, el nombre de Goscinny fue introducido en el Salón de la Fama Will Eisner (Estados Unidos). En enero de 2020, una estatua de bronce fue revelada cerca de su hogar de París, convirtiéndose en el primero mobiliario urbano parisino dedicado a la memoria de un artista de historietas.
