Ocurrió este viernes por la mañana luego de que la Cámara de Casación Penal rechazara los recursos extraordinarios de apelación.
El motorman Marcos Córdoba, que conducía el tren chapa 16 que se estrelló en la estación de Once el 22 de febrero de 2012, y el empresario Claudio Cirigliano se entregaron este viernes por la mañana luego de que la Cámara de Casación Penal rechazara los recursos extraordinarios de apelación que habían presentado tanto él como otros condenados por la tragedia: los ex secretarios de Transporte Juan Pablo Schiavi y Ricardo Jaime .
Poco después, el Tribunal Oral Federal 2 ordenó ejecutar las condenas correspondientes contra quienes hasta hoy estaban en libertad a la espera de la confirmación de sus sentencias. Lo hizo como consecuencia del fallo de ayer de la Cámara Federal de Casación, que rechazó los recursos extraordinarios que habían presentado los condenados para que la Corte revisara sus sentencias. Ahora, el único camino que les queda a los acusados es ir directo en queja a la Corte. Mientras tanto, la decisión de hoy del tribunal es que esperen esa definición final en prisión.
A los abogados de los imputados que no se entregaron aún, un funcionario del tribunal les informó pasadas las 11, en el pasillo del sexto piso de los tribunales de Comodoro Py, que tienen “hasta el mediodía” aproximadamente para entregarse. Que si no, se libraran las órdenes de detención en su contra.
Entre quienes no se presentaron todavía esta Juan Pablo Schiavi. Su defensa adelantó que va a entregarse. Estaba esperando un pedido de libertad que había hecho. Todos los planteos de este tipo fueron rechazados, les informó a los abogados el tribunal.
Córdoba fue el primero en llegar esta mañana. Se entregó en el tribunal, acompañando por su familia. Cirigliano y un grupo de directivos de TBA llegaron una hora más tarde. Se presentaron en el subsuelo de Comodoso Py, donde personal judicial los esperaba con una lista y anotaba cada llegada. Ahora están en el SUM, custodiados por policías.
En diciembre de 2015, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 2 condenó a 21 acusados y absolvió a siete. Cirigliano fue condenado a siete años por estrago culposo y administración fraudulenta contra el Estado. Por los mismos delitos, Schiavi fue sentenciado a ocho años y a Jaime le correspondieron siete como partícipe necesario. Por último, el motorman Marcos Córdoba fue condenado a tres años y seis meses. El resto de los exfuncionarios, directivos de TBA y un tercero beneficiario de los subsidios recibieron penas de tres a ocho años.
Fuente: La Nación.v
