El consejo directivo se opuso a la modificación de la Ley de Contrato de Trabajo. Plantearon la necesidad de elaborar una estrategia por si la iniciativa avanza en el Congreso, pero no cerraron el camino del diálogo con el Gobierno.
El consejo directivo en pleno de la CGT decidió rechazar de plano el intento del gobierno de modificar la Ley de Contrato de Trabajo (LCT) que incluye el megaproyecto de reforma laboral que impulsa el gobierno de Cambiemos.
Los sindicalistas definieron este punto como “innegociable” por entender que, por un lado, significa la destrucción de la legislación que protege al trabajador de los abusos patronales. Pero también que forma parte de una escalada del Gobierno que avanza sobre el sindicalismo como objetivo final terminar con el peronismo.
En ese sentido, se esbozó la necesidad de elaborar una estrategia (medidas sindicales) para actuar en caso de que el proyecto pueda superar el escollo parlamentario, además un mayor trabajo con las regionales para homogeneizar la posición sindical e incluso ordenar al equipo de abogados de la CGT para que actúen de manera coordinada contra los ataques judiciales a los dirigentes gremiales e incluso contra las operaciones mediáticas.
A pesar de que la negativa es rotunda, durante la conferencia de prensa posterior los triunviros Héctor Daer, Carlos Acuña y Juan Carlos Schmid reconocieron que no está cerrado el camino de diálogo con el gobierno. Y es que la negativa del consejo directivo no incluye los tres ítems que habían estado conversando con el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, y el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana: blanqueo laboral, capacitación permanente y agencia de salud.
De todas formas, los triunviros advirtieron que se realizaron una serie de observaciones sobre estos temas y, como señaló Daer, esperan “la respuesta del gobierno”. Hasta ayer nadie se había comunicado para pautar un nuevo encuentro y avanzar sobre estas “observaciones”.
Fuente: Página 12/Sol 91.5