La propuesta prevé determinar los ingresos totales del grupo conviviente y brindar el subsidio en base a este cálculo
El Gobierno nacional estableció los parámetros que implementará para crear una canasta básica energética esencial, diferenciada según las zonas bioclimáticas. A partir de esta canasta, se establecerá un nuevo esquema de subsidios destinado a abordar las situaciones de vulnerabilidad real de cada grupo conviviente.
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La nueva propuesta que está siendo elaborada por la Secretaría de Energía, encabezada por Eduardo Rodríguez Chirillo, abandonará la segmentación de tarifas de los servicios públicos de energía eléctrica y gas natural basada en redes, la cual fue implementada en el último tramo de la administración anterior mediante el decreto 322 de 2022.
De igual manera, se está evaluando si la canasta energética que se determinará según las distintas zonas del país implicará la derogación de la ley 27.637, que dispuso la ampliación del régimen de zona fría vigente hasta el 31 de diciembre de 2031. Esta ley reconoce hasta un 50% de los cuadros tarifarios para el gas en redes o en garrafas.
También se está cuestionando la permanencia del beneficio otorgado a los usuarios más vulnerables de gas natural, aquellos que no tienen acceso a redes y utilizan garrafas de Gas Licuado de Petróleo (GLP). Estos usuarios están contemplados en el Programa Hogar, que consiste en un subsidio directo pagado a través de la Anses.
Todas estas decisiones que conducirán a la determinación de subsidios y sus destinatarios serán objeto de una audiencia pública, similar a la realizada previamente para la segmentación tarifaria durante el Gobierno anterior.
Para la nueva administración, aunque la segmentación de tarifas supuso una mejora en la gestión de los subsidios estatales de acuerdo al nivel de ingresos de los titulares de los servicios, sus resultados aún distan del criterio adecuado para asistir a aquellos que verdaderamente lo necesitan.
A partir de este primer escenario, que complementa la decisión de una readecuación de las tarifas, la Secretaría de Energía comenzó un proceso para orientar los subsidios mediante el establecimiento de una canasta básica energética con volúmenes indispensables de consumo de gas y electricidad según las zonas bioclimáticas.
Así, la propuesta oficial contempla calcular los ingresos totales del grupo conviviente y asignar un porcentaje de esos ingresos, generalmente destinado al pago de la factura de energía.
Así, el subsidio que el Estado proporcionará será la diferencia cuando el costo de la canasta básica energética supere un porcentaje específico de los ingresos totales del grupo conviviente, en lugar de basarse únicamente en los ingresos del titular del servicio, como fue hasta ahora.
