Desde ese momento, la investigación llevada adelante por Rodríguez avanzó y determinó que el detenido Ángel Yamil Benavidez desarrolló maniobras con el fin de obtener mediante engaño, o por lo menos uso no autorizado, los datos personales de 39 personas.

Leer más: El fiscal Rodríguez habló en la previa de la indagatoria al detenido por la cueva del puerto

Además, otros de los movimientos investigados, es el de poner en circulación el dinero obtenido en forma lícita mediante operaciones de depósito en entidades financieras y transferencias entre cuentas bancarias con la finalidad de incorporarlos al patrimonio con apariencia de licitud.

En otro tramo de los considerandos de la solicitud de la medida de la prisión preventiva, se describe que el detenido utilizó nombres y apellidos falsos y realizó actividades de intermediación financiera sin contar con la necesaria intervención del Banco Central de la República Argentina.

El análisis de las comunicaciones de los teléfonos que fueron incautados permitió inferir que tales actividades eran corrientes y habituales.

Benavidez recibió dinero de otras personas por un tiempo acordado a cambio de un interés porcentual calculado en función del monto, beneficiándose con la diferencia del monto producido en intereses. Además, realizando operaciones como intermediario en el cambio de moneda extranjera, dólares, euros, pesos y reales.

Leer más: Habló la dueña del departamento del puerto donde hallaron millones de pesos y miles de dólares

También expuso los riesgos en caso de que Benavidez recupere la libertad. En ese sentido, desarrolló el carácter clandestino y marginal de las actividades que desarrolló, con un marcado desapego por las normas legales y en ejercicio de actividades marginales y clandestinas ejercidas a espaldas de todo control estatal obligatorio. Además, recordó un violento hecho con disparos de arma de fuego en un estudio jurídico ubicado sobre calle 25 de Mayo, con sustracción de un fajo de dólares desde el interior de un inmueble.