La lucha de Michael Fox contra el Parkinson revelados en su nuevo documental
Michael J. Fox reveló que su diagnóstico de Parkinson a la edad de 29 años lo llevó al alcoholismo y que tuvo que tomar pastillas de dopamina y usar accesorios en su mano izquierda para ocultar la enfermedad incurable.
La estrella de Volver al futuro, que ahora tiene 61 años, se está preparando para lanzar su nuevo documental Still: A Michael J. Fox Movie, que debutó en Sundance el viernes y llegará a Apple TV+ más adelante este año.
Fox saltó a la fama por su papel en Family Ties y luego apareció en Back to the Future y Teen Wolf. Sin embargo, el actor dijo que nada de eso importaba, ya que le sorprendió el diagnóstico en el apogeo de su fama.
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Después de recibir su diagnóstico de Parkinson, “bebió para disociarse” y tomó pastillas de dopamina para calmar los síntomas. “Definitivamente era un alcohólico. Pero llevo 30 años sin tomar un trago”, dijo.
Fox descubrió que tenía la enfermedad después de despertarse de una noche de copas y encontrar espasmos en el dedo meñique en 1990. Después de que no paraba, fue a un neurólogo en 1991 y le diagnosticaron la enfermedad.
