El periodista de Sol Play analizó el triunfo agónico de Unión
Unión consiguió un triunfazo ya que empezó perdiendo, luego lo dio vuelta y, en la última jugada del partido, se llevó los tres puntos al ganar 3-2 contra Gimnasia. El periodista de Sol Play, Eduardo Rodríguez, analizó el encuentro en su comentario final.
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“Unión comenzó perdiendo, se lo empató Gimnasia, luego Gimnasia volvió a tomar la delantera, pero Unión lo empató de nuevo. Y en la última, pero última jugada de la noche, en el último remate al arco, Unión se quedó con los tres puntos. Hasta ese momento, no había pasado nada. Y a los tres minutos de juego, 3:30 de juego, Balboa se hizo presente”.
“Ya en el cuarto de hora, Unión, a pesar de ir ganando, no le entregaba nada a Gimnasia. El partido era bastante parejo; no había un claro dominador, pero el ganador era Unión. Aprovechaban los espacios que había del medio hacia atrás y buscaban el arco de Cardozo. Unión trabajaba con solvencia, buscando el arco de Ledesma. Balboa tuvo la oportunidad de poner el 2 a 0, pero no pudo darle la dirección correcta al arco. En el minuto 21, Ledesma se lució, y Orsini recibió un gran pase de Rivero, pero la pelota se desvió”.
“Unión jugaba más cerca de hacer el segundo gol que Gimnasia de empatar, y en una jugada polémica, aunque la televisión mostró que la mano fue bien cobrada, se pitó penal para Gimnasia. Así, el local se encontró empatando un partido que merecía perder, y Unión en el descanso seguía empatando un partido que debía estar ganando por más de un gol”.
“Al comenzar el segundo tiempo, en el minuto 8, Unión apareció como un equipo furioso, como un lobo feroz tratando de devorar a Gimnasia en su propio bosque. En el primer ataque del equipo local, Castillo, de cabeza y con la complicidad de Torren y un descuido de Cardozo, daba vuelta la historia. Ahí se vio la fortaleza anímica de los cambios del Kily, buscando la igualdad. Unión quería más, pero, tras ir perdiendo, debía buscar el empate. Cerca de la media hora, en el minuto 26, Morales le puso un mínimo de justicia”.
“El técnico ya había notado que, tras el gol de Castillo para el 2-1 de Gimnasia, había que cambiar. Dejó cuatro en el fondo y metió a Gerometta por Torren. Luego, casi al mismo tiempo, Gamba por Vargas y Roldán por Rivero. Un minuto después, Morales entró por Orsini y Domina por Balboa”.
“Quedaron tres en el medio, tres para atacar, y me quedo corto. Por las características de los jugadores, me daba la sensación de que el que tenía más resto para jugarse hasta el final por la victoria era Unión. Y así fue. En los últimos minutos, con el árbitro llevándose el silbato a la boca para terminar el encuentro, llegó el remate de Mosqueira, que se desvió en Domina y le dio la victoria a los Rojiblancos”.
“Analizando el partido desde el principio hasta el final, Unión acumuló más méritos que Gimnasia. En el primer tiempo, donde hubo 25-30 minutos de un equipo que fue superior, ese fue Unión. En el pecado estaba la penitencia; no haber podido definir al menos con un gol más de lo que merecía”.
“Como dijo Corvalán, alguna vez la moneda tiene que caer para nuestro lado. Con un gol de carambola al final, Unión en La Plata fue un justo ganador”.
