Violento asalto a un taxista en barrio Guadalupe
Un taxista santafesino fue víctima de un violento robo este jueves por la noche en barrio Guadalupe de la ciudad de Santa Fe. Los delincuentes le pegaron tres “fierrazos” en la cabeza y le robaron el celular laboral, la billetera con la recaudación del día y la ticketera del móvil.
Federico relató en Sol Play el violento asalto que padeció este jueves por la noche cuando tomó pasaje de dos hombres y una mujer. “Alcé dos masculinos y una femenina en Iturraspe y Marcial Candioti en la esquina de la Plaza de las Banderas y el destino era llegar a French y General Paz. Al llegar ahí, me pidieron si podía detener ahí y esperar a un masculino más y estuvimos esperando cinco minutos y no venía“, contó y continuó: “Me pidieron si podía ingresar más hacia el fondo de General Paz y le dije que no por tema de seguridad y me metieron con un fierrazo en la cabeza”.
En el momento de tensión, el taxista apretó el botón de pánico, aceleró el vehículo pero fue nuevamente agredido por uno de los ladrones. Perdió el control del auto y terminó impactando contra el terraplén mientras los delincuentes se dieron a la fuga corriendo hacia el norte de la avenida.
“Por ese motivo arranqué hacia el norte siguiendo General Paz, intenté detenerme en el puesto del gas que están los chicos del Regimiento y volví a recibir otro golpe. Después, no sé, aceleré y busqué empantanarme en un charco grande de barro que había y no me pude detener y en eso recibo otro golpe y en el tercer golpe me voleo, me fui con el auto y paré contra el terraplén“, relató.
“La intención de acelerar fue que agarren miedo y se tiren pero me siguieron pegando. En el terraplén me frenaron los yuyos altos“, siguió. “No me cortaron pero tengo la cabeza llena de chichones”, dijo.
“Me sacaron la billetera con la recaudación del día, el celular del coche y la ticketera. Encontraron la billetera sin el dinero, la ticketera y el celular tirados“, reveló el taxista.
El taxista debió ser asistido por personal médico y luego trasladado al hospital José María Cullen. “Estoy dolorido pero bien”, concluyó.
