Tiroteo en Texas
Una niña de 11 años, Miah Cerrillo, logró sobrevivir a la masacre de Texas al taparse con la sangre de una compañera. El tiroteo ocurrió el pasado 24 de mayo cuando Salvador Ramos de 18 años ingresó a la escuela primaria Robb en Texas, Estados Unidos y comenzó a disparar, dejando un saldo de 21 muertos.
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Miah logró hacerse pasar por muerta y usó la sangre de una compañera para camuflarse y evitar que el asesino le disparara: “Miah vio a su amiga llena de sangre, sacó sangre de ella y se la puso encima”, contó su tía Blanca Rivera, de acuerdo al testimonio compartido en Click 2 Houston.
Según el relato de la tía de la niña, la pequeña comenzó a ser consciente de lo que había ocurrido varias horas después: “Mi cuñada me llamó llorando. Me dijo ‘creo que todo esto acaba de golpear a Miah. Creo que todo se hizo realidad. Estamos en casa, y ella está llorando y con ataques de pánico’”.
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Además de Miah, otro niño contó cómo logró sobrevivir: El chico logró esconderse luego de que Ramos irrumpiera en la escuela y anunciara “es hora de morir”: “Me escondí con fuerza. Y le decía a mi amigo que no hablara porque nos iba a oír”, relató.
Dicho alumno, precisó que sus maestras, Irma García y Eva Mireles, intentaron salvar la vida de los estudiantes: “Eran buenas profesoras. Se pusieron delante de mis compañeros para ayudar. Para salvarlos”.
