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Las Lomas: ¿Cómo es vivir con inseguridad?

El padre José Milessi dialogó en exclusiva con SOL 91.5 manifestando la crítica situación que se vive en el barrio: robos y arrebatos, heridos y muertes. Exige que intervenga el Estado y mayor patrullaje. “Nos acostumbramos a vivir en la necesidad, pero la situación de un robo deja profundas heridas en las personas”, remarcó. 

Barrio Las Lomas.

 

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Padre José Milessi – Malas Costumbres – SOL 91.5

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En barrio Las Lomas los arrebatos y robos son moneda corriente. Los vecinos de la zona, marginados y presos de la necesidad, deben convivir –como pueden- con la inseguridad. ¿Hasta cuándo?, es el interrogante del que muy pocos pueden dar respuestas.

En representación de las familias del barrio noroeste de la ciudad, el padre José Milessi, recordó en los micrófonos de SOL 91.5 cómo es vivir en Las Lomas.

“La situación es ya bastante conocida en el barrio Las Lomas, desde ayer ha tomado noticia pública porque emitimos un comunicado a todas las instituciones del barrio e incluso algunos medios han vendido, es el tema de la inseguridad que se está viviendo frente a unos hechos que son graves en sí y que no han sido más graves por determinada providencia o gracias providencia divina porque podría haber terminado en cierta tragedia como la muerte de alguna persona”, afirmó.

“Son hechos de robos o atracos a mano armada con lo cual, las personas que van a asaltar, están en su situación particular de adicción y no tienen controles sobre su comportamiento y quedan a la buena de Dios, es decir, a la buena de que a esta persona no ataque a tiros a quien se acerque”, cuenta preocupado el padre.

“Hubo una situación en la capilla del barrio en el cual un grupo de adolescentes mujeres, que es un grupo guía que trabaja en la capilla, sufrió la situación de un atraco, hubo un gatilleo y gracias a Dios la bala no salió porque si no deberíamos estar lamentando una situación trágica nuevamente en el barrio”, recordó.

“La comisaría es pobre en agentes y pobre en movilidad y tiene varios barrios y que son todos conflictivos por la situación económica y social que atraviesa. Necesitamos más agentes y patrullajes”, exigió.

Padre José Milessi. Foto: Mauro Re.

“Hace tres años solicitamos que haya un destacamento policial y nos dijeron que el mapa estaba trazado pero que iban a velar por la seguridad. En estos años, hubo situaciones muy complejas dentro del barrio de homicidios y de muerte de personas inocentes”, insistió. “Hubo un intento de la provincia de disponer más patrullaje, pero duró una semana y volvió a la triste normalidad”, agregó.

“Frente a la situación que hicimos pública, lamentablemente, anoche tuvimos que sufrir otra situación delictiva. El jardín, que ya había tenido situaciones de robos, fue víctima otra vez. Quisieron entrar y gracias a Dios no pudieron destruir por completo el enrejado, pero si en parte y quedó inutilizado”, explicó.

“Es algo común en el barrio propio de una situación que viene estancada hace muchos años y se está haciendo crónica”, afirmó.

“Dada la situación social en la que estamos creo que tiene que haber una mayor incidencia de la seguridad pública en nuestros barrios. Si uno mira los índices de homicidio se da en barrios de clases sociales marginadas y económicamente bajas”, destacó. “Por un lado esto genera desesperanza y desazón, falta de confianza, dejadez por parte de muchos miembros, pero otros tratamos de seguir luchando”, señaló.

“Por lo pronto, pedimos y solicitamos la presencia policial más efectiva o más presente. Que la gente pueda transitar con libertad sin temor a que sea asaltada o que le saquen lo poco que ha ganado en la semana o sus pequeños logros personales que ha podido conquistar por sus trabajos”, manifestó.

“La gente de barrio Las Lomas es muy carenciada y vive de changas, del pequeño trabajo de albañilería. Es uno de los barrios más excluidos de la ciudad de Santa Fe”, contó el padre.

“Nos acostumbramos a vivir en la necesidad, pero la situación de un robo deja profundas heridas en las personas. Estas cosas tienen enormes consecuencias sociales, psicológicas y más allá de las cosas físicas”, finalizó.

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