Empieza el goteo de información después de la visita del presidente estadounidense Barack Obama. Se trata de alrededor de 75 que fueron canalizadas a través del organismo.
La visita oficial del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, a Argentina trajo aparejada la promesa de apertura de archivos relacionados con las detenciones ilegales por parte del gobierno argentino durante la dictadura militar 1976-1983. Se trata de información clave para conocer el destino de muchas personas que continúan siendo buscadas por los familiares y por el Estado. El miércoles, la Cancillería convocó a la prensa para dar a conocer la recepción de un completo documento que puede significar el punto de partida para el esclarecimiento de más de 60 casos.
El Vicecanciller argentino, Carlos Foradori, y el Secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, anunciaron las comunicaciones, que datan del período entre 1978 y 1982, sobre violaciones de derechos humanos en la Argentina, ante un requerimiento que hiciera Argentina tanto en administraciones anteriores como actualmente.
“Son denuncias que estaban registradas en el Comité de Convenciones y Recomendaciones del organismo (CRE). Se trata de actas que se fueron conformando, incluso con respuesta del gobierno militar de entonces, vinculadas a reclamos sobre personas desaparecidas. Hay casos de ciudadanos uruguayos y chilenos. Y cabe señalar una particularidad: la UNESCO por aquellos años era una de las pocas ventanillas, como organismo internacional, donde se podían canalizar este tipo de denuncias”, explicó Foradori.
“Ese comité de la UNESCO examinaba violaciones a los derechos humanos vinculadas fundamentalmente con víctimas del ámbito de la educación, la cultura, la ciencia y la comunicación. Hemos obtenido esos documentos hace dos o tres días y, siguiendo desde un comienzo las instrucciones precisas de la Canciller Malcorra, lo vamos a entregar de forma inmediata a la Secretaria de Derechos Humanos para que haga el procesamiento y el entrecruzamiento correspondiente”, añadió el Vicecanciller.
Entre las 75 denuncias que la UNESCO hizo públicas a pedido de Argentina se encuentran los casos de Alfredo Bravo; la familia Tarnopolsky; el músico Miguel Ángel Estrella; los niños uruguayos Anatole y Eva Julien Grisonas; secuestrados en nuestro país y encontrados en Chile; Fernando de Hallgarten; Alejandro Gutiérrez, hijo de la fallecida Presidenta de Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas; Claudia Falcone, víctima de la noche de los lápices; y el poeta Claudio Grandi, entre otros. Cabe destacar el caso del pianista argentino Miguel Ángel Estrella que constituyó un antecedente emblemático ya que la correspondiente denuncia ante el CRE le dio visibilidad internacional y protección. Estrella fue embajador argentino ante la Unesco hasta febrero de este año, cuando fue reemplazado por Rodolfo Terragno.
Fuente: elpaís.es