La Secretaría de Desarrollo Social del Gobierno de la ciudad lleva a cabo una intervención territorial en el distrito costero de Alto Verde y el paraje La Boca. Con un fin social, pero además con la intención de promover una salida laboral, se dictan distintos talleres de formación, como artesanías en barro y arcilla, y computación, entre otros.
Pero además y en un trabajo conjunto con la Provincia, se lleva a cabo un proyecto en el marco del programa Ingenia, que convoca a organizaciones o grupos de jóvenes de al menos 5 integrantes, a la presentación de propuestas.
Motivadas por esto, un grupo de jóvenes de este distrito costero presentó el año pasado la idea de montar un taller de costura, en el que no solo aprenden el oficio, sino además llevan a cabo un fin solidario porque confeccionan prendas que luego son donadas. Este año continuaron con la iniciativa y además le sumaron un taller de fotografía estenopeica.
Las iniciativas seleccionadas por Ingenia apoyan e incentivan propuestas colectivas que pongan en valor a la ciudadanía, el diálogo, los proyectos de vida, los espacios y lenguajes culturales y el bienestar de las juventudes. Justamente esto es lo que persigue el taller de costura que funciona en el salón parroquial de la capilla de Los Milagros, en la manzana 7 de Alto Verde.
La puesta en marcha
La intervención en el territorio comenzó hace tres años y arrancó con distintas actividades abiertas a la comunidad con diferentes talleres, como huertas, debate sobre violencia de género, derecho de los niños y las mujeres, entre otros y así se fueron agrupando a los jóvenes. El año pasado, surgió la posibilidad de presentar un proyecto en el marco de Ingenia 4. “Un grupo armó un proyecto y lo presentó. La idea era armar un taller de costura para las jóvenes, la mayoría de ellas mamás solteras, provenientes de familias numerosas de escasos recursos. Tras su aprobación y puesta en marcha, en los distintos encuentros, además de aprender la técnica, confeccionaron mantas polares que fueron donadas junto con escarpines al servicio de neonatología del Hospital Cullen; también hicieron mochilas para los nenes del jardín de infantes de la escuela Nº 533 Victoriano Montes que está en la manzana 7 de Alto Verde, frente a la capilla”, contó el subsecretario de Acción Social del Municipio, Hugo Marchetti.
Seguir creciendo
Este año se sumaron más jóvenes y, decidieron repetir la experiencia. Volvieron a presentarse y ganaron otra vez. Pero a este taller de costura, le sumaron otro proyecto que tiene que ver con la fotografía estenopeica, que es una técnica mediante la cual se obtienen fotografías y negativos sin prácticamente nada de equipo.
Una profesora de fotografía llega desde Santa Fe y orienta a las jóvenes sobre qué es la fotografía, las cámaras, y con material descartable y ya tomaron las primeras fotos. Ahora van a trabajar la historia del cine y la idea es hacer un corto con las historias de vida de las chicas que integran el grupo.
En relación a la costura, este año también continuaron con la actitud solidaria. Es por eso que están confeccionando cobertores de tela gruesa y abrigada, y los van a donar al hogar de ancianos Nueva Esperanza, ubicado en el norte de la ciudad. También hicieron bufandas polares y manoplas y guantes que fueron donadas a dos jardines de infantes: uno es el de la escuela Victoriano Montes y el otro el de la escuela Nº 1.081 Almafuerte del paraje La Boca.
Los días de encuentro son los martes y jueves de 9 a 12. Los materiales y los insumos para hacer las actividades, como así también el refrigerio y la limpieza del lugar, están previstas dentro del presupuesto del proyecto Ingenia y además reciben un aporte de la Subsecretaría de Acción Social de la Municipalidad. “No sólo hacen cosas para donar, sino también elaboran cosas para ellas y como reciben la capacitación en costura, es un medio de subsistencia, es decir que tiene una salida laboral”, contó Hugo Marchetti.
Más oportunidades
En la misma capilla, se montó una salita de computación que está abierta a la comunidad. Algunas máquinas son aportadas por la parroquia y otras fueron donadas por la UNL a las chicas del grupo de Ingenia, pero ellas lo comparten para que se dicte este taller. También se da un taller de artesanías y las chicas, los viernes hacen trabajos en barro, en arcilla y con otros materiales confeccionan accesorios y bijouterie.
“Estos talleres apuntan a integrar a la comunidad, porque se ven muchos problemas de vínculos, apostando a una resolución pacífica de los conflictos. Se apunta a la integración, la intención es compartir, en donde predomina el respeto”, explicó el funcionario municipal.
En este marco, se abordan distintas problemáticas. María Soledad García es Asistente Social y trabaja con estas jóvenes que se reúnen dos veces a la semana, un día llevan a cabo la parte práctica y la siguiente lo dedican a tratar otros temas, como los derechos de la mujer, del niño, la discapacidad, las relaciones saludables, los límites entre padres e hijos, la no violencia, la trata de personas, entre otros.
Fuente: Prensa Santa Fe ciudad]]>
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