El árbitro argentino Fernando Rapallini expulsó a ocho jugadores luego de distintos hechos de violencia. El partido correspondiente a la fase de grupos terminó 0 a 0.
El clásico de Porto Alegre que se jugó en el marco de la Copa Libertadores, entre Internacional y Gremio, terminó en un escándalo luego de que se produzcan agresiones entre jugadores de ambos equipos, el árbitro argentino, Fernando Rapallini, debió expulsar a ocho futbolistas.
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— Walter Queijeiro (@wqueijeiro) March 13, 2020
En un tumultuoso y escandaloso final 0 a 0, se profundizó el juego fuerte que terminó en una gresca de proporciones entre la mayoría de los protagonistas que estaban en el campo y con varios que ingresaron desde el banco de suplentes.
Abundaron trompadas y puntapiés mientras Rapallini y sus colaboradores trataban de recomponer el orden, sin perder detalles de quienes eran los más revoltosos y agresivos. Finalmente mostró la tarjeta roja a cuatro jugadores de Gremio -tres de campo y uno suplente-, igual cantidad que para los de Internacional, dirigido por el entrenador argentino Eduardo Coudet.
Por Gremio resultaron expulsados Luciano, Pepe, Caio Henrique y el suplente Paulo Miranda. Los de Internacional fueron el defensor argentino Víctor Cuesta, junto a sus compañeros Edenilson, Moises y el suplente Bruno Praxedes.
