Audios
Móvil de Diego Vergara para MVTQN – SOL 91.5
La panadería Santa Teresita, ubicada en Avenida Facundo Zuviría al 4.900, carga un frondoso prontuario de robos en su contra. En 2009 sufrió el peor de todos (ver más abajo).
Este martes, una empleada llegó al negocio y se encontró con la puerta de blindex vulnerada y sin la balanza comercial. A pesar de que la caja registradora estaba abierta y vacía, los delincuentes no pudieron llevarse dinero porque la recaudación nunca se deja allí.
Se trata del 9° robo sobre la Avenida Facundo Zuviría en 15 días que van del año.
Los vecinos y comerciantes de la zona planean reunirse con el objetivo de intentar revertir esta situación, con el apoyo de las autoridades y de la fuerza de seguridad.
La misma panadería y el violento precedente de 2009 (fuente El Litoral – 19 de julio de 2009)
El domingo 19 de julio de ese año, eran poco más de las 7 cuando Lucas Martín García, de 25 años, se disponía a comenzar otra jornada de trabajo en la panadería de su familia.
Lucas acarreaba bolsas con mercaderías junto a su padre, Carlos Domingo García -comerciante y abogado- y una empleada.
De repente irrumpieron en el local dos sujetos jóvenes. Ambos tenían los rostros semicubiertos y uno de ellos portaba un arma de fuego.
Los cacos sorprendieron a la empleada que reaccionó a puro instinto: comenzó a gritar y salió corriendo hacia los fondos del inmueble. Entonces uno de los rufianes pasó por detrás del mostrador e intentó darle alcance.
Para esta parte los gritos de la mujer habían sido advertido por Lucas y por su padre, que se encontraba en la parte superior de la finca.
Pero lo peor se desarrolló en una dependencia contigua al negocio, que hace las veces de depósito. En dicho sector el rufián quedó acorralado y fue allí que Lucas aprovechó para trabarse en lucha. Por su parte el otro ladrón, al ver que las cosas se complicaban, optó por escapar a la carrera.
Lucas y el delincuente estaban en una encarnizada pelea cuando un disparo retumbó en el lugar. A todo esto ya se había sumado a la refriega el dueño del comercio.Padre e hijo lograron reducir al delincuente, quitarle el arma y mantenerlo a raya mientras comenzaban los pedidos de auxilio a la policía.
Fue el propio Carlos quien cargó a su hijo en su vehículo particular y lo llevó hasta el hospital José M. Cullen donde ingresó en condición crítica.
Parte médicoLos médicos que lo recibieron actuaron con la premura del caso y ordenaron una inmediata intervención quirúrgica. Ya sobre este mediodía se supo que la bala, en su recorrido, le perforó el intestino delgado, el grueso y quedó alojada en la nalga.
El joven quedó internado en observación mientras se evalúa una nueva intervención quirúrgica para los próximas horas.
En tanto el delincuente apresado fue identificado como Cristian, de 17 años. El sujeto fue remitido a dependencias de Seguridad Personal donde se constató que cuenta con varios antecedentes por robo a mano armada.
Tres años más tarde el mismo delincuente fue ultimado por un carnicero que defendió su comercio cuando el ladrón intentó robarle.
